La actitud de ambos durante nuestra reunión fue muy relajada, y se
notaba mucho el interés que tienen en su banda y las ganas de
“presumirla”. Tocamos el punto de lo difícil que puede resultar formar
un grupo, por aquello de las distintas personalidades. En su caso, me
contaron que no tuvieron tanto problema para agarrar la onda de cada
uno, pues los tres integrantes andan en el mismo canal la mayor parte
del tiempo, y que las diferencias las tratan en el momento que son dadas
a conocer.
“Una banda no es banda hasta que se meten a grabar”, dijo Mau. En el estudio es cuando más ideas nos salen y si algo no nos parece, lo decimos y vemos cómo lo resolvemos.
También me dijeron que, después de haber estado en algunas bandas, este es el proyecto con el que se sienten cómodos, con el que vale la pena darlo todo y luchar por que crezca lo más posible.
El sonido de Lobo Siberia es crudo y real. Al trio le gusta lo natural a la hora de tocar. Al escuchar su sencillo Sexy, me recuerda a todo el rock de la década de los setenta. Isaac dijo que esto es el resultado de juntar las ideas que cada uno traía en mente, que no buscaban un sonido vintage desde el inicio.
Me gusta la narración…. el grupo tiene futuro